Por último, algunos tallos se caracterizan por poseer una serie de hebras vasculares dispersas aparentemente de manera aleatoria en el parénquima, que impiden delimitar una médula y una corteza. Esta disposición vascular se denomina atactostela (Figura 5), la cual es típica de las monocotiledóneas, mientras que las dos primeras caracterizan a las gimnospermas y al resto de las angiospermas.

Haces vasculares dispersos en una atactostela en el tallo del maíz. La mayor parte del cuerpo de este tallo está constituida por tejido parenquimático, en medio del cual se hallan los haces vasculares.