Los sistemas transdérmicos para administrar medicamentos se han utilizado para control del dolor, dejar de fumar, en el tratamiento de enfermedades cardiovasculares, terapias de reemplazo hormonal, control de problemas de motricidad, tratamiento de hipertensión arterial, prevención del dolor anginoso y ahora como anticonceptivos.
Inicialmente se utilizó progesterona disuelta en un gel de hidroalcohol para el tratamiento local de la mastodinia. Esta terapia no tenía efectos sistémicos pues la enzima 5 alfa reductasa localizada en la piel convierte la progesterona en 5 alfa dehidroprogesterona que es un metabolito inactivo. Las progestinas utilizadas en terapia de reemplazo hormonal y en anticoncepción no son metabolizadas por esta enzima.
La opción de anticoncepción transdérmica no requiere para su aplicación de proveedor(a) de salud, sino una usuaria motivada para colocar un parche semanal durante tres semanas.
El parche con 20 cm2 de área que contiene 6 mg de norelgestromina (NGMN) y 0.60 mg de etinilestradiol (EE), libera 150 microgramos de NGMN y 20 microgramos de EE en el torrente sanguíneo cada 24 horas. Al igual que los AOC tienen efectos sobre FSH, LH, endometrio, moco cervical y motilidad tubaria, evitando el embarazo.